Usar tu iPhone en un sitio público con mucha gente, puede ser un peligro: cualquier persona con malas intenciones podría cogerlo antes de que esté bloqueado y poder acceder al dispositivo a su antojo. Los códigos de cuatro dígitos eran la única forma de proteger los primeros modelos de iPhone. Hoy, 16 años después del debut del iPhone, hemos avanzado hasta un código de acceso estándar de seis dígitos acompañado de huellas dactilares o reconocimiento facial biométrico.
Pensemos que un PIN numérico de cuatro o seis dígitos facilita hasta un millón de combinaciones posibles. Eso no es mucho en una época en la que la tecnología ha avanzado tanto.
Sin embargo, hay una característica que ha estado disponible desde iOS 10 y que yo desconocía hasta hace poco. No tienes por qué conformarte con un código de acceso: puedes crear una contraseña alfanumérica más larga o usar una frase de contraseña para tu iPhone que mejorará enormemente la privacidad de tu información personal. Este código no es un mero PIN, sino una auténtica contraseña completa con letras mayúsculas y minúsculas, números y caracteres especiales.
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Configurar una contraseña para iPhone es tan fácil como cambiar tu PIN. A través de la app Ajustes, elige Face ID & Código para la mayoría de iPhones más nuevos o Touch ID & Código para iPhones con botón Inicio e introduce tu PIN actual. Desplázate hacia abajo hasta que veas la opción ‘Cambiar código de acceso’, donde deberás introducir de nuevo tu código de acceso. A continuación, verás un botón llamado ‘Opciones de contraseña’. Tócalo y aparecerán varias opciones. La que quieres usar es ‘Código alfanumérico personalizado‘.
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Esta función te permite crear una nueva contraseña de hasta 34 caracteres. Esta opción tiene algunas desventajas. Por ejemplo, ya no podrás pulsar el teclado para desbloquear el teléfono, sino que tendrás que utilizar el teclado estándar del iPhone. Tendrás que pulsar ‘Listo o Aceptar’ cada vez que lo uses. Y será otra contraseña más que deberás recordar. Pero hay una gran ventaja: Con el código adecuado, tu teléfono será prácticamente impenetrable.
No siempre tendrás que encontrar el equilibrio entre seguridad y facilidad de uso. Si utilizas un código alfanumérico junto con la seguridad biométrica del teléfono, no tendrás que introducir una contraseña larga cada vez que lo desbloquees. Solo la necesitarás cuando apagues o reinicies el teléfono, o cuando Face ID o Toch ID no funcionen.
Consejo profesional: También puedes usar la opción ‘Código numérico’ personalizado para establecer un código largo con todos los números. Esto puede ser un poco menos seguro, pero más conveniente. Además, podrás seguir utilizando el sencillo teclado numérico.